Hemos comenzado 2024 con dos grandes noticias. Y es que dos de los proyectos que desarrolla Construye Mundo, recibirán financiación para seguir desarrollándose.
Estamos muy agradecidos a la Fundación Fuerte por su aportación para reforzar los medios técnicos para el apoyo al grupo de mujeres de la unidad de transformación de productos agrícolas de la aldea de Guia, en la región de Podor (Senegal). Este proyecto se inscribe en el ámbito de la seguridad alimentaria, el desarrollo rural y el empoderamiento de las mujeres y beneficiará a las 30 mujeres que componen la Unidad de Transformación de Arroz (UTRIZ). Aunque esta unidad ya está funcionando, gracias al apoyo que Construye Mundo, junto a la ONG 3D brindó a este grupo de mujeres, estas todavía no disponen de todos los equipos y materiales necesarios para el óptimo desarrollo de su actividad. Es el caso de un molino de arroz, que ahora podrán comprar gracias a la aportación de la Fundación Fuerte. Actualmente se ven obligadas a desplazarse a una localidad vecina para poder procesar el arroz y elaborar harina, lo que conlleva una pérdida de eficiencia. También podrán adquirir pequeños materiales para la transformación de frutas y verduras (escobas, palas, tamices, coladores, horno, gas, hervidores, tarros de conserva, botellas para el sirope, paños de cocina y material higiénico) que les permitirán trabajar en otros productos y diversificar su actividad comercial. La utilización de estos recursos se traducirá en un aumento significativo de su productividad y permitirá diversificar las actividades generadoras de ingresos de las beneficiarias. Esto, a su vez, contribuirá a aumentar sus ingresos personales y garantizar una mayor seguridad alimentaria tanto para ellas como para sus familias.

Asimismo, queremos agradecer a la Comunidad Base Nuestra Señora de Guadalupe la financiación para la construcción de dos pilones para el huerto que trabajan las mujeres de la región de Salémata. Por medio de acciones anteriores, desde Construye Mundo pudimos apoyar la profundización del pozo que almacena el agua que nutre este huerto, la rehabilitación de la zona exterior y la instalación de una bomba solar con un depósito para extraer agua. Gracias a ello, las mujeres han mejorado sus condiciones de acceso al agua, reduciendo esfuerzos y facilitando su uso. Una vez finalizados estos proyectos, las mujeres identificaron la necesidad de construir dos pilones, dentro del terreno del huerto para almacenar agua destinada al riego. Estos depósitos de forma rectangular y construidos con albañilería empleando piedras, cemento, arena, hormigón, facilitarán el uso del agua para el riego de los cultivos. Además, algunas mujeres que viven en el barrio de Egüath, a 6 kilómetros del centro de Salémata y que trabajan uno de los huertos, nos han transmitido su inquietud, ya que, pese a haber recibido las semillas necesarias para plantar, temen que estas sean devoradas por los animales al no contar con vallado para la zona de siembra. Es por ellos que necesitan comprar bambú para construir una valla. Y esta compra también va a ser financiada por la Comunidad Base Nuestra Señora de Guadalupe. Con estas dos aportaciones van a contribuir a que las mujeres de la región de Salémata puedan gestionar sus huertos de manera eficiente, lo que repercutirá directamente en su calidad de vida.
